La prueba de fuego. Cambiar los hábitos para abrirnos a la
magia
Toca ahora dejar entrar lo nuevo. Para ello tendremos que
dejarle espacio. Hacerlo parte esencial de nuestra vida. Solo con leer
informaciones variadas de miles de sitios no nos abrimos a la magia. La magia
es acción, es real, es palpable y la lectura nos dará conocimiento, pero no
maestría.
Te propongo un reto. Vivir el cambio. Asentar las bases de
tu camino.
Para ello crea un plan de acción. Si, como lo oyes.
Empieza tu nueva vida.
Durante un mínimo de 21 días realiza lo siguiente:
.Las técnicas básicas, por ejemplo, no están ahí para
practicarlas antes de algún evento. Ponles un horario. Dales un lugar en tu
quehacer diario.
.Puedes llevar un diario y apuntar en él tus propósitos y
todo lo que estás haciendo día a día para conseguirlos.
.También puedes hacerte con un herbario. Dedica un día a la
semana (mínimo) a ir a la naturaleza y recolectar tus propias plantas. Esto
hazlo con sumo cuidado. Hay plantas muy parecidas. Estúdialas muy bien antes de
consumir alguna planta que has recogido. Puedes llevarte un buen susto, incluso
“el susto definitivo” no es ningún juego.
.Empieza a tener detalles sencillos como por ejemplo crear
una oración matutina y nocturna. Puedes honrar al Sol y la Luna ( Dios/Diosa, dioses
concretos etc…) todos los días de una manera fácil. Esta práctica te empezará a
familiarizar con los actos rituales futuros más elaborados.
.Crea un calendario lunar para empezar a conectar con los
ciclos de la tierra.
. Celebra los cambios estacionales. Se consciente de que se
celebra y cómo ha ido variando a través de los años. Intenta encontrar su
esencia real. Estudia cómo te sientes en cada estación.
. Crea un pequeño altar. No tienes porqué dedicar al altar a
alguna deidad concreta. Puedes consagrarla a la naturaleza, a Dios si eres de
religión cristiana, a Budha…al universo…no tienes porqué creer en algo
concreto. En realidad estamos hablando de lo mismo sea cual sea el nombre que
le demos.
. Haz tus propias herramientas (ve a la entrada de
herramientas). Las herramientas deben ser útiles. Las cosas decorativas son
eso…mera decoración.
. Si te gustan los oráculos fabrícate el tuyo propio. Pueden
ser runas, cartas pintadas por ti…o invéntalo. Si, has leído bien…invéntalo. Un
oráculo es una herramienta que nos sirve de puente entre nuestra sabiduría
interior y nuestra mente. Si existe una conexión directa entre esa herramienta
y nosotros cobra mucha más fuerza. También puedes sentir que no necesitas
ningún oráculo. Eso también es perfecto.
Si damos un paso más allá te diré que todo oráculo ha sido
inventado por alguien inicialmente. Así que si quieres dibujar unos símbolos en
unas piedras (las runas de las brujas por ejemplo) estarías haciendo un oráculo
poderoso. Todo depende de cómo lo uses.
. Prepara tu lugar sagrado. Un lugar en tu casa, en el
campo, en un parque etc. =busca un sitio y trabaja en el los enraizamientos,
las relajaciones, las visualizaciones, las ofrendas etc.
. Rodéate de gente que te aporte sabiduría. Busca ancianos
que sepan de remedios, de antiguas tradiciones etc. Puede que descubras
verdaderos tesoros.
Si durante 21 días consigues hacer de estas prácticas algo
cotidiano habrás comenzado la verdadera espiral de tu aprendizaje. Este camino puede
ser solitario o en compañía. Recuerda no dejarte llevar por las creencias ni
opiniones de nadie. Tienes un poderoso “filtro interior”.
Úsalo.