EXTRACCIÓN DE PRINCIPIOS ACTIVOS

Métodos de extracción de principios activos vegetales




Maceración
La maceración es uno de los métodos más ancestrales que se conocen. En la antigüedad se les otorgaba a las plantas virtudes que eran activadas mediante el paso de la esencia energética de una planta al agua.
Después se descubrió que también pasaban principios solubles en este medio.
Es el principio de las Flores de Bach y de infinitos remedios de toda la vida.
Para hacer una maceración se deja la planta fresca en un bol con agua todo un día. Asegurándonos de que reciba tanto la luz del sol como de la luna.

Mixtura

Una mixtura es una técnica completa que aúna la extracción de las propiedades tanto hidrosolubles como liposolubles. El proceso es el siguiente: coger planta fresca y poner por separado una parte en un licor (o alcohol metílico si es para uso externo) y la otra en aceite. Pasados 40 días  a la intemperie colamos y mezclamos las dos fases. Se unirán al agitar, pero se mantendrán separadas en reposo. Es ideal para añadir resinas a un preparado de varios ingredientes.

Decocción

Proceso para partes duras o resistentes al calor. Se lleva a ebullición  a fuego muy lento entre 5 y 20 minutos.

Reducción

Cuando pasamos los 20 minutos de ebullición el agua comienza a evaporarse y podemos reducirla ½ o ¼ del volumen inicial. Este proceso es para conseguir principios activos escasos y resistentes a la temperatura.


Infusión

La infusión se utiliza también para obtener virtudes hidrosolubles en plantas aromáticas que si fueran expuestas a mucho tiempo a la acción del calor se volatilizarían sus principios terapéuticos y aromáticos.
Se lleva el agua a ebullición y en este punto se aparta del fuego añadiendo la planta y tapando durante unos minutos.

Extracción por alambique de aceites esenciales e hidrolatos

El alambique es una herramienta básica para artesanos herbalistas, spagiricos y alquimistas.
Aquí te decimos como construirte uno tú mismo sin tener que invertir en un aparato caro, aunque hermoso. Con el tiempo apuesto a que acabarás adquiriendo uno de cobre.

Con el alambique extraemos los aceites esenciales de las plantas. Necesitamos mucha cantidad de planta fresca para conseguir unas cuantas gotas de esencia, pero si no separamos el agua del aceite esencial conseguimos un hidrolato que es muy útil para remedios.

Tintura

En algunos casos los principios activos son solubles en alcohol. No en agua ni es aceite.
Suelen ser plantas ricas en principios resinosos.
La proporción es de ¼ de planta y ¾ de alcohol. Lo dejaos durante dos semanas y ya podemos colar y envasar.
Si vas a consumir la tintura usa aguardiente, anís o cualquier bebida blanca.


Vahos

Son una variante de la infusión, pero se aspiran los vapores que surgen en lugar de beber los preparados.

En una olla ponemos entre 2 y 5 litros de agua y llevar a ebullición. Retiramos y ponemos las plantas, ayuda taparse la cabeza con una toalla para aprovechar todo el vapor. Los vahos también pueden usarse para desinfectar estancias.


Aceite medicinal

Hay dos formas de preparar un aceite medicinal. En caliente o en frío. Para prepararlo en frío pondremos ¾ de planta seca y ¼ de aceite en un bote y los dejaremos reposar 40 días. Colar y envasar en una botella opaca.

 Yo prefiero usar las plantas siempre frescas. Aunque se que no todo el mundo puede permitirse recoger las plantas en el momento.

Para hacer el aceite en caliente usamos la misma proporción y llevamos a baño maría por tres horas. Dejamos enfriar, colamos y envasamos.


Bëllädönä.